El auge de las compras online, el Click&Collect, los Delivery… ante esta realidad, muchos nos hemos preguntado, ¿Las tiendas físicas están en proceso de extinción? ¿Pasarán a convertirse en meros almacenes? ¿Cuál será el futuro de los comercios de calle?
Realmente las nuevas tecnologías han facilitado el día a día de todos nosotros; ahora podemos hacer la compra desde nuestro trabajo y que nos llegue directamente a casa en el horario que mejor nos convenga.
Nos gusta la rapidez y comodidad que nos ofrece el mundo online, pero eso no significa que estemos dispuestos a renunciar a un asesoramiento personalizado y profesional cuando lo necesitamos o a probar un producto antes de llevárnoslo a casa cuando queremos, ¿Y por qué tendríamos que hacerlo si podemos tener las dos cosas? Lo que queremos es un mundo omnicanal.
Y en este punto, ¿las tecnologías pueden ayudar a nuestra farmacia a alcanzar esta meta y adaptar nuestro espacio físico? Por supuesto. Recordemos que, desde la farmacia física, podemos ofrecer asesoramiento personal, la confianza del tú a tú, la prueba de productos, los servicios profesionales, la disponibilidad inmediata de información y productos, etc. Son muchas las ventajas, solo tenemos que saber ponerlas en valor.
Con el auge de las tecnologías en las tiendas físicas podemos aunar todas las posibilidades e innovación que te aporta la digitalización, con la cercanía y las ventajas de la presencialidad y el tú a tú.
Estas son algunas ideas que ya están en el mercado:
- Sensores en Apps móviles con las que podemos hacer un seguimiento del recorrido del cliente dentro de la farmacia, mejorar la exposición y optimizar nuestras campañas de marketing.
- Códigos QR para aportar información de producto al cliente, sus características, beneficios, consejos de uso, precio, etc.
- Espejos inteligentes que ofrezcan al cliente, a partir de un análisis facial, consejos personalizados y recomendaciones en función de su tipo de piel, edad, etc.
- Pantallas táctiles en los lineales con las que solicitar asistencia por parte del farmacéutico, pedir algún producto, ofrecer opinión de la atención recibida, etc.
- Pantallas en el escaparate o la zona de espera desde las que podemos comunicar novedades, campañas, servicios, etc.
- WIFI que permite lanzar notificaciones push, además de ofrecer este servicio de conexión al cliente.
Haciendo un uso inteligente de herramientas como estas, lograremos diferenciarnos y posicionarnos como un espacio de salud profesional e innovador.
Las farmacias debemos evolucionar hacia la omnicanalidad, y si logramos adaptarnos a las nuevas necesidades de nuestros consumidores, renaceremos con fuerza, captando la atención de clientes que buscan una experiencia de compra de calidad y logrando su fidelidad y recomendación.
