Durante estos últimos años se ha podido observar un cambio verdaderamente drástico en la sociedad. Nuestra forma de relacionarnos, de comprar y hasta de salir a la calle ha cambiado por completo debido a la pandemia mundial contra la que todavía seguimos luchando.
Sin embargo, a pesar de esta situación, lo cierto es que durante el año pasado muchas empresas optaron por no quedarse de brazos cruzados y mejoraron sus condiciones abriendo sus negocios a la digitalización de una forma creativa. Un buen ejemplo de esto es el sector de la Farmacia Online, que se abrió paso a través de las tiendas online durante la pandemia y que ha centrado sus esfuerzos en seguir ofreciendo sus productos y garantizar la más alta calidad de atención al cliente de forma omnicanal.
La confianza que hoy en día depositamos en el mundo online es un verdadera macrotendencia, por lo que desde este sector han sabido aprovecharlo digitalizando el modelo de negocio, generando confianza por otros medios y ofreciendo un servicio de atención omnicanal eficaz y cercano.
El papel de las farmacias online durante la pandemia
Las farmacias online vivieron una verdadera ola de trabajo durante la pandemia. Aquellas empresas que apostaron por la digitalización de sus negocios, salvando la diferencia entre el mundo físico y el online, ofrecieron al público una nueva experiencia de compra, cómoda, individualizada y sin riesgos.
Así, invirtiendo recursos y esfuerzo en pasar todo un modelo de negocio con tanta presencia física al mundo digital se ha logrado que los consumidores se sientan tranquilos y confiados cuando van a realizar su compra en una farmacia online.
Un esfuerzo por seguir ofreciendo la mejor atención al cliente
Una de las mayores inversiones que realizaron miles de farmacias en todo el país a la hora de digitalizarse fue el hecho de tratar de seguir manteniendo esa relación tan cercana con sus clientes. Para esto, cada marca escoge su propio camino digital, reflexionando acerca de cuál es su misión en el mercado y manteniendo ese alto nivel de personalización a la hora de aconsejar o guiar en la compra de un producto.
De esta manera, la digitalización de las farmacias se ha convertido en un nuevo mercado en el que se unifican dos pilares fundamentales: el mundo digital y la atención totalmente personalizada. Así, estudiando los datos de interés sobre el público, se pueden establecer una serie de patrones que sirven desde para ofrecer asistencia a través de un chat en una web, hasta para atender consultas mediante un servicio de mensajería o para hacer más sencillo el proceso de compra online.
Lo que sí está claro es que si a algo se debe esta revolución de las farmacias digitales es a que han sabido cuidar muy bien su atención al cliente, sin descuidarla y estando, quizás, más cerca que nunca.
Una inversión en tecnología y desarrollo
Gracias a esta digitalización que han llevado a cabo muchas farmacias en todo el país también se ha encontrado una vía de desarrollo en tecnología que ha ofrecido al mercado un servicio excepcional con grandes innovaciones en cuestión, por ejemplo, de atención al cliente personalizada.
Más allá de las ventas online, que también son una auténtica novedad, las farmacias digitalizadas se han preocupado por incorporar tecnologías como los chatboots para resolver dudas de manera directa, el servicio de atención por Whatsapp o la diversificación de los métodos de pago.
Además, muchas farmacias también han incorporado mejoras en sus servicios de envío, llegando a ofrecer algunas de ellas servicios como Click & Collect y Click express con entregas en 2-6 horas. Todo esto ha provocado un gran aumento también en la imagen de marca de estas farmacias, que se han acercado a su público mostrando un lado más humano a pesar de no contar con el efecto del contacto físico.
Los consumidores apuestan por las marcas más cercanas
Durante la pandemia que vivimos ha quedado claro: los consumidores confían mucho más en aquellas marcas que son cercanas y humanas. En el caso de las farmacias, se ha hecho un esfuerzo enorme por seguir ofreciendo ese asesoramiento personalizado que cualquiera busca cuando quiere comprar un producto, ya sea de forma presencial o digital.
Este servicio al cliente cercano, a pesar de ser por medios digitales, ha repercutido positivamente en la reputación de las marcas y, sobre todo, en la buena imagen que el público tiene de ellas.